Fugaz

Fugaz

Me ponía ese vestido grande y amarillo

Tú peluca mal colocada, se caía... un rojito en los labios.

Corría por el pasillo y me resbalaba a tus pies

Desde tu cama inmóvil mirabas y reías

Ya, ya, ya me rayé! Respondía

Tu risa mi vida, tu vida la mía, fugaz…

Aprendí que el sombrero me lo puedo poner con los pies, 

que las cosquillas son más lindas de adentro hacía afuera,

si te decían MUEVETE! para que te dieras prisa en medio del dolor

tú, BAILABAS.

sigo dándole pasitos a tus sueños de circo, 

con el recuerdo de cada latido, 

con el recuerdo del ultimo, que terminó en mi oído.

Ella

Ella.

Sabían que se pasaba escribiendo cuentos
lo que ocultaba es que se le dibujaban, se volvían reales
Sabían que todo el día tarareaba una y otra canción,
les negaba que atrás estaba ella, silbándole cada melodía.

Se preguntaba por que todos le escribían,
algunos con temor y rabia, otros con gloria y pasión.
En mi unos se pierden, otros se encuentran, me dijo,
yo quiero encontrarte a ti, le respondí.

¿Quién te puso el nombre de mujer? ¿Por qué?
todos los días estamos juntas y aunque a veces me hablas, nunca me dices nada,
tus golpes suelen dejarme resaca, tus caricias me llenan de confusión,
ciertamente que en ti me encuentro, me obligas a pintar, a tocar, a callar,
nos hacemos amigas del leer, nos creamos el placer.

Y con la misma fuerza en ti de mi me alejo, me pierdo
vuelvo a separar mi mente de mis actos, quiero extrañar, llorar, gritar
falsamente me limito mi amor, se lo quiero dar a él, otra vez, me dices, para!
esta vez tus caricias me hacen respirar, me enfrentan con la verdad.

Vuelves a silbar, vuelvo a cantar, me das el ritmo,
me llevas a crear, nos ponemos a jugar, me dejas ver quien soy,
aunque no sepa quien eres, me envuelves en tu laberinto,
me sonríes llena de misterio y me recuerdas tu nombre. SOLEDAD.